El cáncer de próstata es actualmente el tumor maligno más frecuentemente diagnosticado en los hombres. Si el cáncer se detecta a tiempo, el tratamiento que salva la vida del paciente es, entre otros, la cirugía llamada prostatectomía radical.
Durante el procedimiento, el urólogo extirpa la próstata junto con las vesículas seminales y, en determinadas situaciones, también los ganglios linfáticos pélvicos. Si el cáncer está confinado a la próstata, el tratamiento generalmente se completa y el paciente permanece bajo un seguimiento estrecho en una clínica de urología con exámenes periódicos.
En algunos pacientes, por ejemplo, en los que el tumor estaba localmente avanzado o era significativamente maligno, puede ser necesario un tratamiento adyuvante (radioterapia). También puede haber un caso en el que el tratamiento en esta etapa de la enfermedad sea solo terapia hormonal.
La terapia hormonal también forma parte de la terapia combinada cuando la radioterapia radical es el tratamiento de elección.
Después de la extirpación de la próstata, cambian las capacidades funcionales del tracto urinario inferior. La mayoría de los hombres operados tienen que lidiar con incontinencia urinaria (60 – 90%) y disfunción eréctil (90%), lo que reduce significativamente su calidad de vida.
Si se produce incontinencia urinaria después del procedimiento, es necesario informar al urólogo al respecto y discutir con él cómo proceder.
Qué pasa después de la cirugía
La continuación del tratamiento quirúrgico es la rehabilitación urológica, que acelera la eficacia funcional, minimiza los efectos de la cirugía y permite la reincorporación al trabajo oa la actividad física.
La rehabilitación urológica consiste en:
- Movilización postoperatoria de cicatrices.
- Entrenamiento de continencia urinaria.
- Aprender los comportamientos correctos para reducir las pérdidas de orina.
- Ejercicios de suelo pélvico.
- Mejorar la capacidad de la vejiga.
- Eliminando o reduciendo la necesidad de orinar durante la noche y extendiendo el tiempo entre las visitas diarias al baño.
Durante la rehabilitación de pacientes después de una prostatectomía radical, el terapeuta intenta recrear los mecanismos dañados mediante ejercicios seleccionados individualmente, que se modifican según el grado de mejoría o falta de ella.
Durante la fisioterapia, se hace hincapié en:
- Ejercitar la parte voluntaria del músculo del esfínter uretral.
- Apoyando los músculos involuntarios que son importantes para el mecanismo de retención urinaria.
- Fortaleciendo el diafragma pélvico, es decir, esos músculos que nos cierran por abajo.
Se utilizan diferentes tipos de entrenamiento para lograr los objetivos de la terapia:
- Entrenamiento sensoriomotor para mejorar la coordinación neuromotora.
- Fuerza para fortalecer la fuerza muscular.
- Intrínseco, que tiene como objetivo recrear el reflejo de cierre de la uretra (esencial durante el ejercicio, la tos, los estornudos).
¿Cuánto dura la rehabilitación?
El tiempo de rehabilitación depende de la gravedad de los síntomas , el método quirúrgico utilizado y el tiempo transcurrido desde el procedimiento. Un ciclo de rehabilitación completo suele durar de 4 semanas a 3 meses, con una frecuencia media de visitas una vez por semana o cada 2 semanas.
Los primeros ejercicios respiratorios y circulatorios deben recomendarse estando aún en el hospital. Por lo general, los pacientes se reportan para rehabilitación de 4 a 10 semanas después del procedimiento. Este es el tiempo necesario para que los tejidos sanen, cuando el dolor cede y la rehabilitación es más eficiente.
Además de los ejercicios dirigidos que se realizan en el consultorio, los pacientes reciben deberes. La auto-observación profunda también es importante, ya que facilita al terapeuta la elección de los métodos adecuados y acorta el tiempo necesario para la rehabilitación.
Vale la pena continuar con el tratamiento, porque los efectos de la cirugía para salvar vidas y las molestias asociadas son sorprendentes para muchos pacientes. Son vergonzosos y limitan significativamente las actividades diarias. La rehabilitación urológica es una terapia conservadora hecha a medida cuya tarea es tratar la incontinencia urinaria y devolver rápidamente al paciente a la forma física.
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Autor: Klara Kaden, MA (Clínica de Salud de Praga)
Fuente:
- Registro Nacional de Cáncer http://onkologia.org.pl/wp-content/uploads/Nowowory_2018.pdf
El artículo fue creado como parte de la campaña educativa » Cáncer de próstata: lo que todo paciente debe saber «, cuyo socio es Janssen.