Todo lo que necesitas saber sobre el cáncer de páncreas

El cáncer de páncreas es uno de los cánceres más mortales en la actualidad. Con mayor frecuencia se diagnostica en una etapa avanzada, que resulta, entre otros, de debido a la falta de exámenes preventivos efectivos. Se conocen muchos factores de riesgo que provocan esta enfermedad, pero vale la pena señalar que encontrarlos no es sinónimo de detectar un cáncer en el futuro.

La Fundación de Oncología Alivia lleva a cabo actividades educativas y de promoción para ayudar a los pacientes con cáncer. ¿Te gusta lo que hacemos? ¡Haz clic y apóyanos en la lucha contra el cáncer!

Cáncer de páncreas: ¿qué es?

En el caso del cáncer de páncreas, la incidencia está aumentando sistemáticamente. Esto tiene que ver con cuestiones como el envejecimiento de la población, aunque el cáncer suele diagnosticarse en personas muy jóvenes. El pronóstico de esta enfermedad no es el mejor: según las estadísticas, menos del 10% de las personas tienen posibilidades de sobrevivir a los 5 años. Su curso es muy agresivo y muchas veces es imposible realizar una cirugía para extirpar el tumor.

El páncreas es un órgano glandular de unos 12-20 centímetros de largo, que se encuentra detrás del estómago. Es responsable de la producción de insulina y glucagón (función endocrina), así como de jugo pancreático y enzimas digestivas (función exocrina). Anatómicamente, el páncreas se compone de tres partes, a saber, la cabeza, el cuerpo y la cola.

El cáncer de páncreas en un 95% se origina de la parte exocrina, el 5% restante son tumores neuroendocrinos de la parte endocrina. Estos tumores tienen diferente curso clínico y pronóstico, y se tratan con diferentes métodos. Tenga en cuenta que existen varios tipos de cáncer de páncreas. El más frecuentemente diagnosticado es el adenocarcinoma (supone hasta el 90% de los casos de cáncer de páncreas detectado). Los tipos menos comunes incluyen Carcinoma sólido pseudopapilar, folicular y anaplásico.

Causas del cáncer de páncreas

Se desconoce la causa del cáncer de páncreas, pero existen muchos factores que aumentan el riesgo de desarrollarlo. pertenecer a ellos:

Fumar cigarrillos: Es uno de los factores más conocidos. El riesgo de desarrollar cáncer de páncreas en fumadores es un 2,5-3,6% mayor que en no fumadores. Además, aumenta en proporción al tiempo de exposición al humo y la cantidad de tabaco fumado.

Edad: Con mayor frecuencia, la enfermedad se diagnostica en pacientes mayores de 55 años. Sin embargo, también se puede detectar en personas mucho más jóvenes.

Dieta mal balanceada: El cáncer de páncreas a menudo se asocia con el consumo frecuente de carne roja procesada y grasa animal y con una cantidad insuficiente de vegetales en el menú diario. Hasta el momento, no se ha encontrado una relación estrecha entre los cánceres de este grupo y el consumo de café o alcohol.

El sobrepeso y la obesidad: Son factores de riesgo independientes. Se cree que la obesidad abdominal en particular contribuye al desarrollo de la enfermedad, que puede estar asociada con cambios hormonales.

Predisposición genética: En el 5-10% de los casos, el cáncer de páncreas afecta a personas cuyos familiares también han recibido dicho diagnóstico. A veces, la causa es un síndrome predisponente causado por trastornos genéticos específicos. Según estimaciones, el riesgo de cáncer de páncreas es 57 veces mayor para aquellas familias con al menos 4 familiares afectados.

Enfermedades seleccionadas: Hay estudios que muestran la relación entre el cáncer de páncreas y la diabetes, la pancreatitis crónica y la cirrosis.

Un factor de riesgo adicional se considera un grupo sanguíneo diferente al O. Resulta que las personas con los grupos A, B y AB tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer.

Síntomas del cáncer de páncreas 

Los síntomas del cáncer de páncreas dependen de su ubicación exacta, pero también de la etapa de avance. Muchos pacientes se quejan principalmente de malestar o dolor abdominal. Por lo general, se siente en el epigastrio y puede irradiarse a la columna vertebral. Otros síntomas incluyen:

  • Náuseas y vómitos.
  • Falta de apetito.
  • Pérdida de peso.
  • Diarrea.

Los cánceres generalmente se desarrollan en la cabeza del páncreas, lo que lleva a la obstrucción del conducto biliar e ictericia. Luego, las membranas mucosas, la piel y los ojos se vuelven amarillos, a veces también puede notar orina más oscura y heces descoloridas. La diabetes suele ser el primer síntoma del cáncer de páncreas. Cuando la enfermedad provoca la obstrucción del conducto pancreático, se produce la inflamación del órgano. Los síntomas observados con menos frecuencia incluyen:

  • Disfunción hepática.
  • Trombosis venosa.
  • Depresión.
  • Agrandamiento de la circunferencia abdominal.
  • Trastorno del vaciamiento gástrico.

Al igual que con muchos otros tipos de cáncer, el cáncer de páncreas a menudo se desarrolla de forma asintomática. Esto significa que cuando se diagnostica, a menudo ya se encuentra en una etapa más avanzada.

Diagnóstico de cáncer de páncreas

El hecho de que el cáncer de páncreas se detecte relativamente tarde está relacionado con la falta de diagnósticos sencillos que permitan su detección más temprana. Actualmente, no existen pruebas de detección como en el caso de, por ejemplo, el cáncer de mama, de cuello uterino o colorrectal. Las excepciones son las personas que tienen antecedentes familiares de cáncer de páncreas y las que tienen pancreatitis hereditaria. A partir de los 40 años se recomienda realizar una USE anual y marcadores CA 19-9.

EUS significa ultrasonografía endoscópica. El médico, utilizando un instrumento especial, examina el tracto digestivo, así como sus paredes y órganos adyacentes. Durante este estudio, es posible la biopsia de los cambios detectados en el páncreas. CA 19-9 es un biomarcador sérico. Sin embargo, no es muy útil en el diagnóstico debido a su baja sensibilidad y especificidad. Es más importante en el pronóstico de recurrencia de la enfermedad después de la resección del tumor.

Ante la sospecha de cáncer de páncreas, lo más importante es detectar la lesión y determinar su estadio para elegir el tratamiento adecuado. Muy a menudo, la prueba diagnóstica inicial es la tomografía computarizada combinada con la administración intravenosa de un agente de contraste. Esto suele ser suficiente para confirmar la enfermedad, pero sucede que es solo el comienzo del diagnóstico. En algunos pacientes se debe realizar adicionalmente la ya mencionada ecografía endoscópica o la colangiopancreatografía retrógrada endoscópica o CPRE. 

Las pruebas adicionales pueden incluir:

  • Laparoscopia.
  • Gammagrafía de receptores.
  • Biopsia.
  • Imagen de resonancia magnética.
  • Métodos de tratamiento.

Se estima que solo en un 10-20% de los casos es posible realizar un tratamiento quirúrgico primario. El cáncer de páncreas generalmente se encuentra en una etapa más avanzada, por lo que la resección no siempre es una opción. Durante la operación se extirpa la parte del órgano afectada por el cáncer, y normalmente también la vesícula biliar, las vías biliares, el bazo, el duodeno o parte del estómago.

La resección no significa una cura completa. Existe un alto riesgo de recurrencia de la enfermedad, también con metástasis a distancia, por lo que es necesario el uso de terapia adyuvante. Esto puede ser quimioterapia o quimiorradiación. Estos métodos se pueden implementar no solo después de la cirugía, sino también antes para reducir la gravedad del cáncer.

Este texto fue creado gracias a los pagos recurrentes de más de 8.000 donantes habituales. ¡Haz clic y únete al increíble grupo de luchadores contra el cáncer!

En algunos pacientes, solo se utiliza un tratamiento paliativo. Su objetivo es aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida. Luego se implementa la quimioterapia, a veces combinada con radioterapia. Cuando aparece diabetes u otra enfermedad como resultado de la compresión del tumor, se realizan procedimientos adicionales. Se trata, por ejemplo, de la instalación de stents que eliminen la infiltración tumoral en las vías biliares.

Todavía se están realizando investigaciones, gracias a las cuales se puede mejorar tanto el diagnóstico como el tratamiento del cáncer de páncreas. Cuanto mejor se diagnostique la enfermedad, más eficaz será la lucha por la salud.

 Autor: Fundación Oncología – Alivia

Fuentes:

Nuestra lucha contra el cáncer y nuestra labor informativa, como este artículo, dependen de donantes como tú.

¡Gracias por tu invaluable apoyo!